The Atlas

Se acerca el final de mi contrato de arrendamiento en The Atlas y no tengo palabras para describir mi estancia. Ante todo, como vi en otra reseña, las paredes son MUY GRUESAS. Casi nunca oigo a mis vecinos. También tengo una perra que, cuando se enoja, ladra sin parar. Me mudé aquí desde un apartamento con paredes muy finas y me preocupaba que sus ladridos fueran un problema. No solo no recibí ninguna queja, sino que el edificio está lleno de otros amantes de los perros. Se oye algo de ruido de la calle, pero nada más. Otras ventajas de vivir en The Atlas: excelentes acabados en el apartamento (encimeras de granito, electrodomésticos de acero inoxidable, etc.), estacionamiento privado, el personal es muy amable y servicial, y los demás inquilinos son realmente amables y considerados entre sí. El alquiler puede subir rápidamente, ya que hay que pagar cargos adicionales por mascotas, estacionamiento y cualquier alquiler a corto plazo, pero se paga lo justo y The Atlas merece la pena. Si me quedara en la zona seguiría viviendo aquí.

Recientemente terminé el alquiler de un apartamento en el noveno piso del Atlas. Tuve que mudarme a otra zona de Columbus, pero si volviera al centro, el Atlas sería mi primera opción. Lo que más disfruté de mi experiencia en el Atlas fue lo tranquilo que era mi apartamento. Naturalmente, había ruido de la calle, algo normal si vives en el centro. Pero casi nunca oí ruido de los apartamentos de alrededor. Fue maravilloso liberarme del estrés de tener que escuchar la cacofonía de los vecinos. También disfruté de la amabilidad y cortesía de quienes vivían cerca y en otras zonas del edificio. A todo esto hay que sumarle un hermoso edificio histórico, una excelente ubicación, tres ascensores y estacionamiento adjunto.

Actualmente somos inquilinos de uno de los apartamentos de dos habitaciones en un piso alto del Atlas. Los problemas empezaron poco después de mudarnos. Hay una discoteca muy ruidosa llamada Long Street Live al otro lado de la calle, y como las ventanas son de mala calidad, casi todos los sábados por la noche, entre las 10 y las 3 de la madrugada, es muy difícil dormir. Los sábados que no salimos, no podemos hacer nada para que el ruido desaparezca en casa. Solo este verano, nuestro aire acondicionado central se ha estropeado tres veces. Hoy, mientras escribo esto, hace 30 °C en el apartamento y el aire acondicionado central lleva una semana sin funcionar. Sí, eso significa que no hay aire acondicionado en una semana. El miércoles por fin nos dieron uno de los cuatro aparatos de ventana (sí, este edificio de 60 apartamentos solo tiene cuatro de ventana). Este aire acondicionado solo enfría una habitación y probablemente triplicará nuestra factura de luz. La luz y el agua en este edificio son un rollo. Hay un cargo “común“ en CADA factura, así que aproximadamente $35 x 2 por cada pago corresponde a los inquilinos que pagan los gastos comunes, como si fuéramos los dueños de estos apartamentos. Cuando le dije a la administración del edificio que el aire acondicionado portátil de ventana no era suficiente para nuestro apartamento, no me ofrecieron una solución; simplemente me dijeron: “Si no puede quedarse, avíseme y le daremos el aire acondicionado a otra persona“. He vivido en muchos edificios y ciudades y nunca he recibido un servicio tan deficiente. Evite este edificio y pruebe con otro en el centro con mejor servicio.

No tengo palabras para describir lo bueno que es. El estacionamiento es cómodo justo detrás del edificio, a poca distancia del distrito Arena y del mercado norte. Uber cuesta $5 para ir a cualquier lugar del centro. La historia y la estética del edificio son inigualables. Si buscas un lugar, al menos debes echarle un vistazo. Vi todos los demás edificios de lujo y siempre volvía a Atlas. Lindsay y Wendy, las administradoras del edificio, son geniales. ¡Espero que sigan aquí tanto como yo!