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Una comunidad preciosa y tranquila con un ambiente muy agradable. La piscina es espectacular y el personal es increíblemente atento. Hay un montón de actividades divertidas para que puedas conectar con los vecinos, y el gimnasio está totalmente equipado para todas tus necesidades de entrenamiento. ¡Muy recomendable!

Aunque se promociona como una residencia «lujosa y sostenible» con servicios de nivel resort, la realidad dista mucho de estas grandilocuentes afirmaciones. La ropa de cama desordenada y esparcida por el balcón no solo contradice la opulencia prometida, sino que también pone en entredicho el compromiso del establecimiento con la limpieza y el cuidado. Tales descuidos disminuyen significativamente el atractivo de una vista que, de otro modo, sería impresionante. Además, el lema del establecimiento, «pequeño pero detallista», parece haberse olvidado por completo. A pesar de las múltiples quejas presentadas en la recepción, que también funciona como conserje, encargada de paquetería y de seguridad, parece haber un preocupante problema de falta de personal. Con 250 apartamentos y una ocupación del 90%, resulta desconcertante que se aleguen limitaciones presupuestarias como motivo para no contratar personal adicional.