Quail Hollow and Sherwood Knoll Apartments

Llevo 11 años viviendo en los apartamentos Quail Hollow. La administración es fantástica y todo se resuelve con mucha rapidez. Su ubicación en Fort Mitchell ofrece un entorno muy agradable y es un lugar estupendo para vivir. Además, el alquiler es bastante razonable.

¿Serpiente? En el baño. Me echaron la culpa. Nunca más. Si pudiera poner cero estrellas, pondría cero.

Al mes de alquilar, me salió moho negro del aire acondicionado. Al tercer mes, se me estropeó la nevera. Tuve que tirar la comida cuatro veces en un mes porque se echó a perder. Se negaron a arreglar nada y encima me echaron la culpa a mí. ¡JAMÁS ALQUILEN AQUÍ!

Me encanta vivir aquí. Tengo 25 años y llevo más de dos años viviendo aquí. Empecé en un apartamento de una habitación y ¡me encantó! Me cambié a uno de dos habitaciones con balcón cuando mi prometido se mudó. Los de mantenimiento son geniales, y no se quedan atrás; vienen rápido a visitarme y resuelven cualquier problema rápidamente. Me siento segura con ellos y les he pedido que hagan trabajos cuando no estoy en casa sin ningún problema. Siempre me dan actualizaciones y dejan un recibo indicando lo que hicieron. La casera es increíble, no tengo ninguna queja, se encarga de cualquier problema que le plantees y no tolera drogas ni inquilinos problemáticos. Una vez pensé que me había dejado la plancha encendida y me fui a trabajar. La llamé y se ofreció a ir a ver si la había apagado. Me siento segura viviendo aquí y seguiré viviendo aquí. Desde que vivo aquí hace dos años, no he tenido ningún problema de insectos ni moho.

Infestado de bichos. ¿Te hacen firmar un contrato contra chinches? ¡Qué sucio! Al parecer, uno de los lugares se incendió, todo el edificio olía y crujía al entrar la gente, las paredes son finísimas, arreglaron nuestro apartamento antes de mudarnos y lo hicieron fatal (trabajadores vagos), nunca hubo agua caliente y había bichos. Nunca vimos un bicho en toda nuestra vida hasta el día que nos mudamos a estos apartamentos asquerosos, y de repente los encontramos por todas partes. Tuvimos que tirar todos los muebles y luego intentaron culparnos. Lo curioso es que nos mudamos a vivir en otro sitio y aún no hemos visto ni un solo bicho. Éramos gente limpia que se mudó a un apartamento sucio y nos estafaron. Lección aprendida. Les hemos dicho a todos que nunca alquilen con esta gente ni ninguno de sus apartamentos. Absolutamente asqueroso. La gerente incluso dijo que su propio hijo se enfermó de chinches por vivir allí...