Cavalier Club

Llevo viviendo aquí unos tres años y tuve la suerte de mudarme cuando lo hice. Al principio, todo estaba incluido: la tarifa por mascota, el trastero, el aparcamiento y los servicios. Ahora cobran una tarifa por mascota, el trastero y los servicios son aparte. Justo hoy cambiaron las normas de aparcamiento. Una de las mejores cosas de este lugar era el enorme aparcamiento gratuito para residentes y visitantes; nunca estaba lleno, ¡teníamos plazas de sobra! Antes, los visitantes podían aparcar en la zona reservada para visitantes hasta 24 horas y, si querían más tiempo, necesitaban un pase de la oficina. SIEMPRE FUE GRATIS. Según el correo electrónico: «El aparcamiento para visitantes es gratuito durante las dos primeras horas dentro de un periodo de 24 horas. Después de dos horas, se cobrarán 8 $ a los visitantes para aparcar durante la noche». Pronto, a los residentes se les cobrarán 5 $ al mes. Sinceramente, preferiría pagar 10 $ si eso significa que puedo recibir visitas gratis. Es un cambio innecesario y una clara forma de sacar dinero extra (¡TENEMOS UN ENORME APARCAMIENTO!).

Llevo más de un año viviendo aquí y de verdad quería que este lugar se convirtiera en mi hogar permanente. En general, me gusta el sitio: hay mucho aparcamiento y los apartamentos son grandes, pero últimamente no soporto la falta de respeto de los vecinos y la negativa de la administración a hacer nada. Se permite fumar, pero obviamente no se anuncia abiertamente. Se considera un lugar donde se permite fumar porque no dice lo contrario. Fue un error ingenuo por mi parte. Mis vecinos, que se mudaron después que yo, fuman sin parar y viven en un apartamento sin balcón. El humo sale por las rejillas de ventilación y, cuando abro los armarios de la cocina, huele a cigarrillo. Es asqueroso. Tengo que dejar las ventanas abiertas y entonces no puedo encender la calefacción porque empeora el olor. Vivo en un congelador; es horrible. La administración me dijo al principio que podían advertir a los vecinos porque estaban molestando a otro inquilino; dejaron de fumar durante meses, pero luego llegó la nueva administración y volvieron a fumar dentro del edificio. Dijeron que no había NADA que pudieran hacer salvo mudarse, pero que el alquiler podría subir y sugirieron comprar un humidificador. Esto a pesar de que el contrato de arrendamiento incluye una cláusula que dice: “El arrendatario no deberá hacer ni permitir que se hagan ruidos molestos ni realizar ni permitir ningún acto que interfiera de manera irrazonable con los derechos, la comodidad o el bienestar de otros arrendatarios o empleados del arrendador“. El contrato también estipula que no se permite fumar en las zonas comunes, y sin embargo, el pasillo huele constantemente a humo de cigarrillo. Busquen otro lugar donde vivir. :(